LA GALLINA DE LOS HUEVOS DE ORO
Érase una gallina que ponía
un huevo de oro al dueño cada día.
Aun con tanta ganancia mal contento,
quiso el rico avariento
descubrir de una vez la mina de oro,
y hallar en menos tiempo más tesoro.
Matóla, abrióla el vientre de contado;
pero después de haberla registrado,
¿qué sucedió? que muerta la gallina,
perdió su huevo de oro y no halló la mina.
¡cuántos hay que teniendo lo bastante
enriquecerse quieren al instante,
abrazando proyectos
a veces de tan rápidos efectos
que sólo en pocos meses,
cuando se contemplaban ya marqueses,
contando sus millones,
se vieron en la calle sin calzones.
4 comentarios
eugeni -
carlos -
Belén -
silvia y claudia -
que lo emos echo las 2 juntas y que antes de criticarnos penseis que nos a costado bastante esfuerzo ya que era muy tarde y no nos acordabamos ni de el poeta ni de la web
buenas noches